Festival de Jazz de Vitoria-Gasteiz, jueves 14 de julio
Los chicos están bien. Nuevos “crooners” para una vieja ceremonia: jazz para jugar a las damas. Locas se vuelven con José James y Jamie Cullum. Prueba del algodón: el reventón de personal en Mendizorroza. Y se da el caso de que todos los integrismos que en el jazz han sido, desde los tiempos de Al Jolson o Nat King Cole, se han puesto muy de los nervios con los románticos cantores de jazz. Cuanto más encandilan a las señoras, más se mosquean los “jazz-head” de turno. A José y a Jamie les importa un suspiro que los caballeros las prefieran rubias o de color café. Ellos salen a escena y las señoras se ponen como motos. José James, a su manera de hombre tranquilo, tiene un aquel de Johnny Hartman del hip-hop. Y Jamie Cullum no se priva de nada, ni de pintarla en plan polvorilla, ni de tocar el piano con (literalmente) el culo. Ellos gustan y habrá otras razones, pero la música es quien dirige sus encantos. James va de “cool”. Y Jamie va de… Cullum. Me divertí con los dos. James, obsesivo y molón, dando la brasa contra la brutalidad policial o cantando “Moanin”. Y Jamie, aullando “Come Together” o gimoteado “Gran Torino”, canta, corre, salta… Todo muy a lo “swinging mod”. Se mola que da gusto, pero se lo curra con sincero estajanovismo. Mendizorroza boca abajo. No hay toallas en toda Vitoria para secar lo que sudaron las nenas.
2 comentarios:
No me extraña, si alguien está como un queso ese es Jamie Cullum,
estoy segura que hasta el charlista instructor se sintió invadido por un no sé que al verlo en acción...
Y esa corbatita a medio anudar....uf!!!
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