jueves, 29 de noviembre de 2007

“Imágenes prohibidas”, censura siniestra y enferma



“La caza del conejo, ¿pero ustedes saben lo qué eso quiere decir?”, les dijo la censura a Elias Querejeta y Carlos Saura. Productor y director dejaron el título de su película solamente en “La caza”. Querejeta confesó que ahí el siniestro trabajo de los censores había conseguido mejorar la idea inicial. Fue uno de los muchos testimonios que aportó el excelente, documento “Imágenes prohibidas”, dirigido por Vicente Romero, una producción de TVE que miró hacia la repugnante censura con concienzudo rigor y educada mala leche.

Aseguraron fuentes bien informadas por haberla ejercido o padecido que la censura oficial, con el brazo tenebroso del nacional-catolicismo de la Iglesia, gozaba con el intrusismo de una rama familiar y caprichosa: las mujeres de los ministros franquistas. El esperpento llegó a todo tipo de extremos. Hubo alguno tolerante y feliz: un cura dejó pasar el lascivo contoneo de Marilyn Monroe en “Niágara”, porque creyó que esa forma pecadora de mover el culo era producto de una cojera de la actriz.

No tuvo la misma suerte Luis García Berlanga en el rodaje de “Los jueves, milagro”, porque los obispos pusieron al padre Garau a corregir el guión a pie de rodaje. Berlanga aseguró que había hecho gestiones legales para que se incluyera al cura en los títulos de crédito de su película.

La censura tuvo problemas con todo lo que se le puso en sus reales: los ardores guerreros podían no ser suficientes, y los ardores amorosos, excesivos. Escuchamos, no sin cierta desconfianza, que con Fraga al frente del Ministerio de Información y Turismo, con aquella “apertura” del demonio, la censura dejó de ser una cosa de enfermos sexuales. A Basilio Martín Patino le prohibieron “Canciones para después de una guerra”. Tiene narices el asunto – y Patino tuvo sobredosis de arte-, porque las canciones eran de lo más popular y las imágenes estaban sacadas del NO-DO. “Imágenes prohibidas” debería enseñarse hoy a los niños y jóvenes en las escuelas. Es una cuestión de salud mental, de educación para la ciudadanía.

Hoy, es absolutamente necesario también otro documento sobre la censura en la historia de la televisión española, desde su nacimiento en 1956 hasta donde se pueda del momento que vivimos. Veríamos y escucharíamos barbaridades de años francamente cercanos, ni remotos ni lejanos.

Publicado en Público

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno tu blog.
Busco una película en la que actúa James Wood, trata sobre el director de un museo en Estados Unidos, tiene que exibir unas fotos y tratan de censurarlas. Básicamente es eso. En las obras de J.Wood no aparece tal película

Anónimo dijo...

sentadito en la escalera para Anónimo:
La película es "Galería de Obscenidades", dirigida por Frank Pierson.